The Turn of a Friendly Card, canción de Alan Parsons Project. Letra, traducción (el título es difícil de traducir sin que suene estúpido xD) y algunas curiosidades al final del post.
Andaba yo buscando una versión en vivo de la magnífica canción de Cyndi Lauper, Time after time, que ella cantó en un concierto que recuerdo haber visto siendo niño y que era mucho más lenta e intimista que su ochentera versión original. No he sido capaz de dar con ella (papá… ¿alguna sugerencia? :P), pero me he encontrado con esta, de Eva Cassidy, que se le parece mucho. Letra, traducción y otras versiones que he encontrado en GoEar al final del post; no os perdáis la acústica de la propia Cyndi Lauper con Sarah McLachlan.
Según cuentan en Wired, los muy simpáticos de fark.com han creado un genial meme: compare a cada uno de los cuatro políticos de moda en USA (Obama y Biden, por un lado, y McCain y Palin, por otro) con una imagen… y los resultados son de este estilo:
Me he pasado un buen rato riéndome viendo este set de Flickr donde se recogen algunas de las mejores fotos. Los capones que le caen a la Palin son de órdago. Ya estáis tardando xD Leer más »
La aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno
y un huracán de negras palomas
que chapotean las aguas podridas.
La aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras
buscando entre las aristas
nardos de angustia dibujada.
La aurora llega y nadie la recibe en su boca
porque allí no hay mañana ni esperanza posible.
A veces las monedas en enjambres furiosos
taladran y devoran abandonados niños.
Los primeros que salen comprenden con sus huesos
que no habrá paraísos ni amores deshojados;
saben que van al cieno de números y leyes,
a los juegos sin arte, a sudores sin fruto.
La luz es sepultada por cadenas y ruidos
en impúdico reto de ciencia sin raíces.
Por los barrios hay gentes que vacilan insomnes
como recién salidas de un naufragio de sangre.
Déjenme empezar confesándoles que para mí, cuando era joven, asistir a conferencias solía ser un suplicio. Al menos así era en mi departamento, en donde la mayor parte de mis compañeros consideraban apasionante escuchar durante hora y media la vida y milagros del ugarítico tardío y su relación con el protosemítico, mientras que yo tenía que hacer malabarismos para no ponerme a roncar en las narices del doctor de turno. Claro está que mis actuales colegas, en aquel entonces, sólo lo eran porque compartíamos físicamente un espacio; de hecho, ellos, obedeciendo a su impecable formación (y no sé si a una latente antipatía), preferían usar para mí el término, quizá más exacto, de «El infiltrado». Leer más »
Neferett ya nos puso hace tiempo una canción de Duffy, la marchosa Mercy. Esta es la segunda canción que yo escuché de ella, mucho más intimista (un poco rollo Winehouse, pero con los ojos y los brazos menos maltratados). Letra y traducción de la misma (por un servidor) en el final del post. Como curiosidad, el título de la canción hace referencia a una estación del Metro de Londres.